Rechazamos las agresiones que fuera objeto la periodista Daniela Moina

Las expresiones o cuestionamientos a una persona en el desempeño de un cargo público construyen sociedades democráticas, pues la ciudadanía tiene un legítimo interés de mantenerse informada y de conocer lo que incide sobre el funcionamiento del Estado.

Formular preguntas que incomoden a autoridades y grupos humanos es parte de la labor periodística y es indispensable para asegurar el ejercicio del derecho a la expresión de la población.

Desde el Consejo de Comunicación rechazamos las agresiones que recibió la periodista del diario Extra, Daniela Moina, por parte de un servidor legislativo.

Rechazamos las amenazas de muerte realizadas en contra del periodista Rusbelt Cango

El Consejo de Comunicación rechaza las amenazas de muerte realizadas en contra del periodista lojano Rusbelt Cango.

De acuerdo a nuestras competencias, hemos levantado la alerta e informado a las instituciones correspondientes para que se proteja al trabajador de la comunicación y se investigue el origen de estas amenazas.

Hacemos un llamado a no recurrir a la judicialización de la prensa en el pleno ejercicio de sus funciones.

El Consejo de Comunicación recuerda que un servidor público o una figura con proyección pública, está sujeto a la crítica o al escrutinio público, debido a la responsabilidad y a la transparencia de las gestiones que tienen a su cargo.

La libertad de expresión y la libertad de prensa, son indispensables para enriquecer el debate público y evitar posibles efectos inhibitorios por temor a represalias futuras, que afecten la dimensión social del derecho a acceder libremente a la información.

El Consejo de Comunicación hace un llamado a no recurrir a la judicialización de la prensa en el pleno ejercicio de sus funciones.